Cuando un bebé recibe un diagnóstico de plagiocefalia, las familias buscan soluciones seguras y eficaces para mejorar la simetría craneal. En este artículo, presentamos un caso de éxito que destaca los resultados positivos del tratamiento con ortesis craneal en un bebé de ocho meses. Esta experiencia demuestra cómo la intervención temprana puede marcar una diferencia significativa en el desarrollo del bebé, tanto en términos estéticos como funcionales.
Diagnóstico inicial y evaluación
Un bebé de ocho meses llegó a nosotros con una asimetría craneal de 17 mm, clasificada como plagiocefalia moderada a severa. Su familia, preocupada por la forma de su cabeza, buscó nuestra ayuda tras consultar a un especialista. Durante la primera visita en Orme, realizamos una evaluación exhaustiva con escáner 3D, craneómetro y cinta métrica. También tomamos fotografías para documentar el punto de partida.
En esta etapa, explicamos a la familia cómo funcionaba el tratamiento con ortesis craneal, el proceso de adaptación del bebé y la importancia del seguimiento regular. Además, se les ofreció la posibilidad de personalizar el casco, lo que contribuyó a hacer el tratamiento más atractivo y acorde a sus gustos.
Proceso de tratamiento y seguimiento
Con un diagnóstico claro, iniciamos el tratamiento de inmediato. A partir del escaneo 3D, se digitalizó el molde de la cabeza del bebé. Este molde fue rectificado para crear una nueva forma más equilibrada y simétrica. Con esa nueva base, se diseñó el casco, que guía el crecimiento craneal hacia las zonas aplanadas y limita el crecimiento en las áreas más prominentes. Durante las primeras semanas, el bebé comenzó a usar el casco de forma gradual, aumentando el tiempo de uso cada día hasta alcanzar el régimen recomendado.
Cada quince días realizamos revisiones para monitorear el progreso. En estas consultas, tomamos nuevas mediciones y fotografías. Esto no solo ayudó a seguir la evolución, sino que también aportó tranquilidad a los padres y confianza en el tratamiento. Durante las revisiones aprovechamos para repasar las rutinas de higiene y mantenimiento y aprovechamos para resolver dudas.
Resultados: de 17 mm a 6 mm en solo dos meses
Tras dos meses de tratamiento, la asimetría craneal se redujo de 17 mm a 6 mm. Los cambios eran visibles a simpe vista: la simetría de la cabeza mejoró notablemente, proporcionando un aspecto más natural y equilibrado.
Este caso de éxito muestra que incluso en bebés mayores, el tratamiento con ortesis craneal puede ser altamente efectivo.
Impacto en el desarrollo del bebé
Corregir la plagiocefalia a tiempo no solo mejora la estética, sino que también reduce riesgos futuros. Una cabeza más simétrica puede prevenir problemas musculares y posturales. Por ejemplo, el aplanamiento craneal a menudo obliga al bebé a mirar hacia un solo lado, lo que puede limitar el desarrollo de la movilidad y la fuerza en el lado opuesto. Esto puede influir en la postura, el equilibrio y el desarrollo motriz general.
Gracias a la intervención temprana, este bebé alcanzó una mejor alineación craneal y corporal, sentando las bases para un desarrollo motor y emocional más saludable.
Este caso de éxito resalta los beneficios del tratamiento con ortesis craneal. La reducción de la asimetría de 17 mm a 6 mm en solo dos meses subraya la importancia de actuar a tiempo y de contar con el apoyo de profesionales especializados.
Si estás considerando este tratamiento para tu bebé, esta experiencia real te ofrece una visión clara de lo que puedes lograr. No solo mejorará la simetría craneal, sino que también contribuirá a un desarrollo integral más equilibrado.
¿Tienes dudas? aquí puedes consultar nuestra guía sobre plagiocefalia y aquí nuestra recopilación con preguntas frecuentes en estos casos.
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